Pestañas

jueves, 22 de diciembre de 2011

La (accidentada) visita al Belén Municipal










































El Maestro Paco se equivocó...: citó a los voluntariosos padres y madres acompañantes a las 9 y media en la clase, pero a esa hora ya teníamos que estar en la puerta del Belén Municipal, así que muchos y muchas se quedaron colgados y, tal y como les dejé el aviso en la entrada del cole, tuvieron que irse por su cuenta al encuentro del grupo en plena calle...  Lo siento mucho, de veras.
Ese fue sólo el primer capítulo de esta mañana surrealista (por decirlo de forma suave)...  Cuando llegamos a la puerta del Belén, estaba cerrada a cal y canto, no había absolutamente nadie para recibirnos: tres clases de 25 niños y niñas de 3 años, con sus respectivas Maestras y muchos papás y mamás voluntarios acompañándonos, tirados en mitad de la calle.  A la desesperada, telefoneamos al colegio, y desde dirección nos dijeron que, según el Ayuntamiento, la persona encargada estaba..."vistiéndose dentro"; pero allí no había nadie, nadie, nadie.  El director del cole vino a buscarnos, pero para entonces ya había llegado el señor-con-gripe-que-no-se-iba-a-vestir-para-no-pegarles-nada-a-los-niños...  Algunos papás e incluso mamás de las presentes se ofrecieron para desempeñar esa tarea, pero finalmente el señor accedió y...se vistió...
La visita en sí fue rápida y sin contratiempos, ya dentro del recinto, pero por mucho que intentamos remediar la penosa situación los adultos y las adultas allí presentes ("Papá Noel está haciendo caca", etcétera), lo cierto es que se deslució bastante.  Una pena.
Hasta donde llega nuestro conocimiento de la versión de los hechos, y por lo que vivimos en primera persona (del plural), muy mal por el señor-con-gripe (ojalá se haya mejorado ya), y muy mal por el Ayuntamiento (por extensión).  Y muy bien por la Dirección del colegio, que estuvo solícita cuando les reclamamos su ayuda.  Y bravo, bravísimo, por los papás y mamás, que mantuvieron el tipo durante todo el rato (largo) que duró el episodio bochornoso.  Y por supuesto, aplauso fuerte para los niños y las niñas de 3 años, que una vez más consiguieron con sus sonrisas y su paciencia darnos una lección de espíritu navideño digna de ejemplo.  :D
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2 comentarios:

  1. Inés María Chaves31 de enero de 2012, 10:11

    No sabía nada del episodio de este día. Pero, aún habiendo pasado ya Navidad y los sentimientos que esa época siempre crea en nosotros, yo leyendo tu narración he soltado unas lagrimitas. Creo que por vuestro espíritu y lo que les hacéis llegar a los niños. Lamento mucho que lo que os pasó pero me alegra ver que tenemos un colegio que ¡¡vale millones...¡¡
    Gracias por todo.

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    1. Desde luego, Inés María: pasaremos los Maestros y las Maestras, cambiarán (o no) los ayuntamientos, llegarán otros/as nuevos/as, pero siempre, siempre los protagonistas serán los niños y las niñas, y es sobre todo por ellos/as por lo que este cole vale millones. ¡Ellas y ellos sí que valen! ;)

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